"... elocuente testimonio de un excepcional valor para la historia de México..."
Decreto de zona de monumentos históricos en la ciudad de Cuautla.
Desde sus orígenes prehispánicos, Cuautla, Morelos, fue uno de los señoríos pertenecientes a Amilpanecapan, posteriormente región de Amilpas, la cual hacia el año de 1560 fue reclamada por la Corona Española como pueblos sujetos al rey, proceso en que se favoreció a la Corona y que duró hasta el año de 1581.
Cuautla fungió también, como principal centro urbano y económico de la región de Amilpas, adquiriendo una traza urbana de carácter civil y religiosa definida por importantes casas de alcaldes y miembros del ayuntamiento, así como por los antiguos conventos de San Diego y Santo Domingo, instaurándose en la región, molinos, ingenios y haciendas dedicadas a la explotación de azúcar.
Por sus características de tierra, clima y abundante agua, Cuautla fue durante la época colonial una región muy valorada, ya que contó con una cuenca de riego privilegiada, donde el río Cuautla-Chinameca proporcionó agua suficiente de riego aprovechada por los canales y acueductos de las haciendas.
Cuautla cobró relevancia durante la Independencia de México debido a que José María Morelos y Pavón derrotó ahí a las tropas realistas comandadas por Félix María Calleja, después de resistir un sitio de 72 días que inició el 19 de febrero y finalizó el 2 de mayo de 1812, lo que permitió a Morelos reorganizar su ejército encabezado por Matamoros, Galeana y Bravo, logrando una mayor extensión de su dominio y la culminación ideológica del proyecto de nación en el Congreso de Chilpancingo; posteriormente, en 1829, Cuautla recibió el título de "Heroica Ciudad de Morelos", mediante decreto expedido por el Congreso del Estado de México, al que perteneció el territorio del actual Estado de Morelos.
Durante la Revolución Mexicana, Cuautla fue sitiada una vez más por el general Emiliano Zapata Salazar, en donde enfrentó a las tropas del Ejército Federal, perdiendo la vida en la hacienda de Chinameca, Morelos. Su cuerpo sería trasladado a Cuautla para ser sepultado en el panteón municipal y años después se erigiría un mausoleo en su honor.
Las características específicas de la Zona de Monumentos Históricos, la relación de espacios y su estructura urbana tal como hoy se conservan, son elocuente testimonio de un excepcional valor para la historia de México.